Prueba del Kia Rio 1.2 CVVT Concept

El nuevo Kia Rio es después del Picanto, el utilitario por excelencia de la gama Kia. Siendo la competencia tan dura como lo es en su segmento, no le hemos puesto las cosas fáciles. Sin embargo, hemos de decir, que ha aprobado con nota.

Desde fuera, el nuevo Kia Rio es un coche que, en otros colores distintos al de la unidad de pruebas, nos ha resultado especialmente atractivo, tiene un empaque y una personalidad evidentes, lo cual se agradece.

Pasemos al interior y a las sensaciones que nos ha proporcionado el nuevo Kia Rio 1.2.

En el interior encontramos un diseño muy bonito, la verdad, con unos plásticos de aspecto blando que nos han sorprendido, la verdad esperábamos encontrar algo peor por el precio del coche.

En general, podemos decir que el interior del nuevo Kia Rio 1.2 nos ha gustado, por diversos detalles como las costuras en el apoyabrazos, los cromados y el volante multifunción.

La dirección es muy blanda en parado, tanto que la podemos mover con un dedo mientras hacemos nuestras maniobras de aparcamiento, lo cual se agradece. Lo bueno que tiene es que conforme ganamos velocidad, va ganando en dureza. El tacto del cambio es muy suave, al igual que el embrague.

Decir que en este acabado básico el pomo, el volante y el apoyabrazos son de un plástico gomoso, especialmente tratado, que no está muy mal del todo, quedará por ver, que tal resiste el paso del tiempo. También en el exterior, las manecillas, la parrilla y retrovisores son negros, específico de esta versión básica.

Pero para ser básica trae de serie los espejos eléctricos, un ordenador de viaje, los seis airbags, el ESP, el apoyabrazos y la toma auxiliar junto con USB.

El motor del nuevo Kia Rio 1.2 es un 1.200 c.c de 86 c.v, de tacto un tanto «eléctrico», pero muy agradable por su suavidad. En ciudad resulta un motor ideal, y en autopista, simplemente, se defiende. A 120 km/h, va un poco por encima de 3000 vueltas, que no es demasiado, eso sí, para afrontar un repecho pronunciado y largo, hemos tenido que recurrir a la cuarta velocidad, puesto que no se le pueden pedir milagros al pequeño 1.2.

Los consumos, nos consta que son muy buenos. Hemos comprobado entre llenado y llenado un consumo de 5,5l haciendo una media de unos 100 km/h en carretera. Esto no está nada mal.

El comportamiento del Kia Rio 1.2 es tirando a cómodo, filtra bien las irregularidades, manteniendo el balanceo dentro de unos límites, quizás le falta el tacto de un Polo, por ejemplo, pero podemos decir que deja un buen sabor de boca a su conductor.

Lo malo, entre los defectos, es que no lleva indicador de temperatura del motor, dejando esta función a un testigo.

En resumen, si buscamos un utilitario a buen precio, el Kia Rio 1.2 no nos defraudará. Es un coche ideal para la ciudad, cómodo, económico de mantenimiento y consumo.